La semana pasada preparé mi selección de 33 prendas de ropa de otoño. Esto es por el Proyecto 333, que consiste en reducir tu armario a 33 prendas de ropa, incluido calzado y complementos. Y con el que, por cierto, estoy más que encantada.
Guión
Ventajas del proyecto 333
– Los traslados son mucho más sencillos.
– Mi armario está ordenado y con mucho más espacio.
– Encuentro la ropa que quiero con facilidad.
– Sólo uso ropa con el que estoy 100% cómoda y que me favorece.
– Soy más consciente a la hora de comprar nuevas prendas.
– No tengo que renunciar a los colores.
– Hay personas que necesitan la ropa que yo no me pongo.
– Menos ropa es igual a más tiempo y dinero.
– Ha resultado ser una excusa perfecta para hablar sobre minimalismo con otras personas.
– Los accesorios no son importantes.
Mis 33 prendas para Otoño
Por supuesto muchas de estas prendas las he usado también en verano y son casi iguales a las que uso en primavera.
Una de las cosas que me echaba para otras era pensar que tenía que renunciar a los colores para que todo combinara entre sí, pero me he dado cuenta de que no.
Camisetas otoño proyecto 333
Aquí hay dos camisetas repetidas que sustituyen en imagen a una camiseta azúl y una morada.
Chaquetas otoño proyecto 333
En esta parte hay dos prendas que están repetidas que sustituyen en imagen a un jersey de cuello alto negro y una chaqueta verde.
Pantalones y faldas otoño proyecto 333
Calzado y complementos otoño proyecto 333
No, no hay complementos porque me he dado cuenta de que llevo siempre lo mismo que es con lo que me siento cómoda. Además al usarlo todos los días no entran en el conteo, aunque lo podrían hacer porque en total tengo 31 prendas.
Espero que te unas, te aseguro que no te arrepentirás.
Más información: mis prendas de verano, Proyecto 333 en castellano, Proyecto 333 en inglés.
¡Hola, preciosa! Yo también me he puesto ya a re-minimalizar el armario, ¡animada por tus fotos! A lo largo del verano, misteriosamente, mi armario fue creciendo y creciendo de 40 prendas que dejé hasta ser una montaña de ropa de origen inexplicable, jejeje. Esta vez, el gran paso ha sido, como nos dijiste en la entrada anterior, deshacerse de la ropa que no entra en el top 33. La otra vez la guardé celosamente en cajas. Hoy me dispongo a donarlo todo excepto los vestidos de ir “arreglá”. Regalaré algunos y otros los conservaré. El resto de prendas… Incluyendo un arsenal de camisetas muy queridas, más de seis pares de pantalones, algunos casi nuevos, ropa deportiva que nunca uso, jerseis viejos “para estar por casa” que rozaban la decena, y medias en cantidades impensables, se van. La vocecilla interior de “quién sabe si necesitarás estos vaqueros algun día, no los tires…” sigue hablando, pero ahora la dejo en su cháchara mientras hago bolsas de ropa,jajajaja.
Besazos y gracias por la inspiracion 🙂
Gracias a ti. Me alegro mucho de este gran paso, enhorabuena 🙂
Estoy segura de que no te arrepentirás y dentro de muy poco empezarás a notar los beneficios, no sólo en este ámbito sino también en otros de tu vida. Porque no es simplemente el tiempo que pasamos decidiendo qué ponernos, o el dinero que invertimos, es sobre todo decidir enfocar tu energía. Es sentir que todo lo que llevas siempre te hace sentir bien porque esas, son las únicas prendas que deberíamos de conservar. Y el armario, al final, es simplemente una metáfora de nuestra vida.
Gracias Ana I.