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Minimalismo y silencio: encontrar la quietud en ti

minimalismo y silencio

Texto del libro “El caballero de la armadura oxidada”


Esta semana he recibido visitas, han venido unos amigos de Alemania y de Usa, así es que he estado viendo la ciudad y compartiendo tiempo con ellos.

Ayer por la tarde fuimos a la Sagrada Familia, ellos también son Lectores de Aura, así es que nos dimos una hora de tiempo para que cada cual en soledad explorase la energía del lugar.

Minimalismo y cilencio que viene de fuera

Yo intenté averiguar cuál era mi lugar de poder allí y me senté. Cerré los ojos y me concentré en mi respiración entonces me puse a meditar y al cabo de pocos minutos/segundos abrí los ojos de nuevo porque alguien quería pasar por donde estaba. Volví de nuevo a mi estado meditativo pero esta vez una voz me distrajo.

Lo cierto es que visitar un lugar tan turístico en julio/agosto hace que el espacio esté lleno de personas. Así me descubrí a mi misma quejándome internamente y deseando estar en soledad para poder vivir realmente lo “sagrado” de ese espacio.

Minimalismo y silencio que viene de dentro

De repente al cerrar los ojos me di cuenta de que la Sagrada familia es como nuestro cuerpo, un espacio sagrado con el que podemos conectar si ponemos el foco. Hay ocasiones en las que hay más personas, hay ocasiones en las que hay más pensamientos en tu cabeza pero el espacio no deja de ser sagrado por ello.

El equilibrio o el silencio puede estar influido por el entorno o tus propia situación personal pero al final es simplemente una decisión personal.

Realmente no existen las condiciones perfectas, sino las condiciones que hay, las que son. No tiene sentido desear unas condiciones diferentes, sino aprender a navegar con las que existen en este momento.

Así la meditación puede ser muy fácil cuando no hay pensamientos pero es probable que sea mucho más fructífera cuando puedes conectar más allá del ruido interior.

Frase del libro Esencia Minimalista

Minimalismo y silencio

Este vídeo es una parte de la presentación del libro en la que “me desnudo” hablando del silencio. Yo necesité un retiro de tres semanas en mitad de la nada para conectar con mi silencio pero lo cierto es que podemos hacerlo en cualquier lugar, con cualquier circunstancia.

¿Necesitas un espacio de silencio para reconectar?

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