Vivo en un lugar con estaciones. Esto quiere decir que en mi vestuario se encuentra de forma habitual el abrigo, desde finales de noviembre hasta febrero, este año quizás algo menos.
Aunque, en mi caso, esta palabra está escrita en singular.
Guión
¿Cuántos abrigos tienes?
Personalmente, hace tiempo que me acompaña un solo abrigo, hace tiempo que entré en la corriente minimalista en este sentido. Creo que todo empezó en el viaje en furgoneta de 10 meses por Nueva Zelanda. En aquel momento la falta de espacio fue la responsable de que de manera natural tomara esta decisión.
Mi pareja y yo atravesamos el país con una furgoneta no muy grande, de esas que sólo tienen el colchón detrás sobre una estructura de madera. Así, sólo disponía de dos cajoneras ocultas debajo del colchón y ahí se encontraban TODAS mis pertenencias.
Y sí, entre mis pertenencias se encontraba ese hula hop gigante, pero eso es otro tema.
Al volver de aquel viaje fui consciente de que no sólo se puede vivir con un abrigo, sino que es algo que recomiendo a todo el mundo, ya que la vida se simplifica de forma significativa.
¿Has oído hablar del concepto moderno de uniforme?
Hay una tendencia en auge relacionada con llevar siempre la misma ropa, como si de un uniforme se tratara. Ocurría con Steve Jobs, con el jersey negro de cuello alto. Ocurre con Obama, con esos trajes de chaqueta en versión azul o gris, o incluso con el creador de Facebook, a quien sin duda recuerdas con una camiseta de algodón gris con el logotipo de su empresa.
Cuando le preguntaron a este último en relación a su escasa variedad en el vestuario su respuesta fue clara: “Quiero liberar mi vida, de forma que tenga que tomar las menores decisiones posibles sobre cualquier cosa, excepto sobre cómo puedo servir mejor a mi comunidad”.
Aunque tienen más de una prenda, estéticamente, siempre es la misma. Y ¿sabes una cosa más? Estas personas tienen una cosa en común: son personas influyentes que toman decisiones importantes a lo largo del día.
Está demostrado que tomar decisiones genera fatiga, por ello ahorrarte una toma de decisiones cada día a lo largo de diversos días, sobre todo en periodos en los que tengas que centrarte en otras cosas (siempre), es fundamental.
Las ventajas de tener un único abrigo:
–No tienes que pensar en qué ponerte. Esto disminuye tu cansancio y aumenta tu productividad. Ahora puedes centrarte en lo que de verdad importa.
-Tienes más espacio en el armario. Lo que suele ocupar más espacio son estas prendas.
-Ahorro económico. Haz la suma de lo que has gastado en abrigos a lo largo de estos dos años.
Desde hace tiempo que doné los abrigos de mí armario y desde entonces tengo un único abrigo. En mi caso, es la segunda temporada que me acompaña. (información sobre dónde donar)
¿Cómo elegir tu único abrigo?
Hay algunas características importantes:
-Color: Que sea un color/estampado que combine con todo, algo de lo que no te canses.
-Clima: a la hora de comprarlo ten en cuenta el tiempo de la zona donde vives. Esto también determinará el tejido.
-Material: Evita materiales sintéticos. En mi caso prefiero que sea al menos 60% lana.
Para lavarlo hasta ahora lo he lavado en la lavadora con el programa de lana. Y este año con una cuchilla de afeitar estuve quitándole algunas bolitas que le salieron: ¿el resultado? abrigo nuevo.
-Calidad: Vas a llevarlo mucho tiempo, permítete invertir en un producto de calidad, esto no tiene que estar relacionado con el precio. Fíjate en la etiqueta para asegurarte de que no estás pagando la marca.
-Versátil: un abrigo que te pueda servir para llevar el día a día pero que también te permita acudir a la cena de navidad.
-Abrigo feliz: Prioriza productos locales cuya fabricación no lleve impresa la explotación laboral. El ganador es Italiano, el país donde estaba viviendo cuando lo compré.
-Bonito: Para mí es importante que me guste, más allá del color neutro, tiene que tener una característica que me atraiga. Ten en cuenta que lo vas a ver casi todos los días en época invernal.
El protagonista de este post descansa en su percha mientras escribo estas palabras, esperando con paciencia para ser usado. No tiene dudas. Sabe que otro día más será él el elegido.
¿Te unes a la moda minimalista de un sólo un abrigo? ¿Quieres construir tu armario cápsula?